El viernes, la Policía Nacional Civil (PNC) logró la captura de cinco pandilleros pertenecientes a la MS-13 que buscaban evadir la justicia durante el régimen de excepción en su intento de escapar hacia Guatemala.
Los terroristas capturados en Tepecoyo han sido identificados como Sergio Abelardo Nolasco Gallardo, conocido como «Fideo»; Mario Humberto Herrera Ayala, alias «Singer de Tepecoyo»; Kevin Gabriel García Barrera, apodado «Vaca»; José Francisco Ayala, también conocido como «El Chico»; y Miguel Simeón Gómez Melaza, alias «El Miken».
El ministro de Seguridad, Gustavo Villatoro, a través de su cuenta oficial de Twitter, hizo hincapié en la determinación del Estado para capturar a todos los terroristas involucrados: «Lo hemos dicho claro, vamos a capturar hasta el último terrorista. Este día, tras un operativo ejecutado por nuestra PNC, hemos capturado a cinco remanentes de un grupo armado en Tepecoyo. Sepan que somos un Estado firme y contundente, no vamos a dar un solo paso atrás hasta desarticular por completo a estas estructuras terroristas que por años mantuvieron de luto a nuestra nación».
Durante la operación, la PNC y la Fiscalía General de la República (FGR) incautaron tres armas de fuego, $5,000 en efectivo, un vehículo y cuatro teléfonos celulares, según informó el ministro Villatoro.
El titular de Seguridad reveló también que la inteligencia policial había obtenido información que indicaba que los terroristas buscaban refugiarse en Guatemala para eludir a las autoridades.
«Estos criminales están relacionados con un hecho de violencia ocurrido el 20 de octubre de 2022 en el municipio de Tepecoyo. Les llegó la hora de pagar por cada crimen y delito cometido», sentenció el ministro Villatoro.
Las autoridades continúan con las investigaciones para determinar la participación de los capturados en otros delitos y asegurar que sean llevados ante la justicia para responder por sus acciones. La captura de estos pandilleros representa un avance significativo en los esfuerzos del Gobierno para combatir y desmantelar las estructuras criminales que han causado estragos en la seguridad del país.