Las políticas públicas de seguridad lideradas por el Presidente de la República, Nayib Bukele, han entregado resultados históricos para la población salvadoreña. Desde el inicio su gestión en el año 2019, se han registrado bajas en homicidios a escala nacional sorprendentes, lo que refleja el éxito del Plan Control Territorial y la guerra contra las pandillas que ejecuta el Gobierno, basado en las facultades que otorga la Constitución y las leyes penales del país.
Los pocos delitos contra la vida que se registran en el territorio nacional son resueltos prontamente por el Gabinete de Seguridad con la consigna: homicidio cometido, homicida capturado. La impunidad de los criminales ya no es permitida por este Gobierno.
Desde que el Jefe de Estado asumió su mandato, el 1 de junio de 2019, los salvadoreños han tenido 300 días sin homicidios, cifras históricas que llevan seguridad y tranquilidad a los habitantes de las comunidades en los 262 municipios.
Desde el 27 de marzo del 2022, que se implementó el régimen de excepción, han sido capturados más de 63 mil pandilleros, entre los que figuran cabecillas, 2,318 armas de fuego, 2,913 vehículos, 15,280 teléfonos celulares y $1,7 millones en efectivo.
“Los salvadoreños de bien se merecen vivir en libertad. Por eso, estamos trabajando 24/7 en nuestras estrategias de seguridad, para heredarles a nuestros niños y niñas un El Salvador libre y seguro”, ha afirmado el ministro de Justicia y Seguridad, Gustavo Villatoro en reiteradas ocasiones.
Con el Plan Control Territorial y el régimen de excepción, este Gobierno asegura que se ha entregado una verdadera libertad a los salvadoreños para que puedan vivir en comunidades seguras y en paz, libres de pandillas.