La vicepresidenta de Colombia, Francia Márquez, denunció este martes el hallazgo de un “artefacto con más de 7 kilos de material explosivo” en la vía que conduce a su residencia familiar en Suárez, en el departamento del Cauca (suroeste).
“Integrantes de mi equipo de seguridad hallaron un artefacto con más de 7 kilos de material explosivo en la vía que conduce a mi residencia familiar en la vereda de Yolombó, en Suárez, Cauca”, informó la vicepresidenta en su cuenta de Twitter.
Agregó que el artefacto agregado “fue destruido de manera controlada por personal antiexplosivos de la Sijin (Dirección de Investigación Criminal e Interpol de la Policía)”.
Márquez denunció este suceso como “un nuevo intento de atentar” contra su vida.
“Sin embargo, no dejaremos de trabajar, día tras día, hasta alcanzar la Paz Total que Colombia sueña y necesita. No desistiremos hasta que en cada territorio sea posible vivir en verdadera armonía”
La ahora vicepresidenta y entonces activista tuvo que salir huyendo de Suárez en 2014 después de recibir una llamada en la que amenazaron con que era hora de “ajustar cuentas” por su activismo y labor de denuncia en la región, especialmente contra la minería que existe en su territorio natal.
Pero los atentados y amenazas no acabaron cuando dejó Suárez, y por el contrario aumentaron cuando entró en la carrera política. Antes de la segunda vuelta de las elecciones, en un acto de cierre de campaña, el equipo de seguridad de Márquez la tuvo que bajar del escenario después de que un láser verde la apuntara mientras daba un discurso.
Además de las amenazas, la vicepresidenta de Colombia también ha sufrido insultos y calificativos racistas por ser la primera mujer y la primera afrodescendiente en ser la número dos del Ejecutivo de Colombia.