La Policía chilena desactivó este lunes un explosivo colocado en la sede de la Fundación Paz Ciudadana, en una zona residencial del barrio capitalino de Providencia.
El fiscal jefe de Alta Complejidad de la Región Metropolitana Sur, Alex Cortez, dijo que la bomba estaba «lista para detonar y generar daño», pero que el temporizador no funcionó.
Cortez detalló que aún no ha habido ninguna reivindicación que se atribuya la autoría, pero explicó que las características del artefacto son similares a otros explosivos encontrados anteriormente en la capital.
Según informó Carabineros de Chile, la Policía recibió el aviso del explosivo hacia las 8.40 hora local (13.40 GMT) por parte de trabajadores de la misma fundación, que encontraron un bulto sospechoso en el antejardín del edificio, detrás de una muralla que impedía que fuera visto desde la calle.
Los agentes, tras confirmar la peligrosidad del artefacto, acordonaron las calles circundantes a la fundación, donde viven decenas de personas, y enviaron un robot para desactivar el sistema.
La Fiscalía de la Región Metropolitana Sur será la encargada de investigar el caso que, si bien está bajo secreto, trabaja en posibles conexiones con otros explosivos con características similares encontrados anteriormente en la capital chilena.
La ministra vocera del Gobierno de Chile, Camila Vallejo, preguntada por el suceso en el palacio presidencial de La Moneda, anunció que su Ejecutivo interpondrá una querella por vulnerar el control de armas para que se investigue quién colocó el artefacto explosivo.
«Los antecedentes confirman que era una bomba. Por suerte no hay heridos ni consecuencias graves, pero la situación podría haber sido distinta. (…) Necesitamos llegar a las últimas consecuencias para determinar quién estuvo detrás de la colocación de un artefacto de esas envergaduras», aseguró la ministra.
La Fundación de Paz Ciudadana trabaja en fomentar políticas públicas en torno a la seguridad y la justicia, incidiendo en ámbitos como la lucha contra el tráfico de drogas.