Hasta el momento, al menos 73.000 personas han llegado a los países vecinos de Sudán desde que estallaron los combates a mediados de abril, según Acnur, que mencionó a 50.000 personas el viernes pasado.
«Acnur, junto con gobiernos y socios, se está preparando para la posibilidad de que más de 800.000 personas huyan de los combates en Sudán para llegar a los países vecinos», dijo Grandi en su cuenta de Twitter.
«Esperamos no llegar a eso, pero si la violencia no toca fin, veremos más personas obligadas a huir de Sudán en busca de seguridad», agregó en la red social.
Es la primera vez que Acnur publica una cifra tan precisa para cuantificar el número de personas que podrían huir a países vecinos. Previamente había mencionado «cientos de miles» de personas.
Hasta ahora, la mayoría de las personas han huido a Chad y Sudán del Sur.
El 25 de abril, Acnur indicó que hasta 270.000 personas podrían refugiarse en estos dos países, pero no precisó detalles de los demás países vecinos de Sudán: Egipto, Etiopía, Eritrea, Libia y la República Centroafricana.
Los combates, que han dejado cientos de muertos, enfrentan a los generales Burhan y Daglo, que se aliaron en un golpe de Estado en 2021, marginando a millones de sudaneses.
Ataques aéreos, tiroteos y explosiones sacudieron la capital sudanesa de nuevo el lunes, a pesar del anuncio de una tregua en los combates entre el ejército y los paramilitares, que ha llevado a Sudán al borde de una «catástrofe» humanitaria y sanitaria según la ONU.
El domingo, Grandi dijo en su cuenta de Twitter que más de 3.000 sursudaneses que estaban en Sudán, «ahora huyen diariamente de su país».