La tercera edición de la UEFA Nations League se resolvió con el entretenido espectáculo que animaron en Rotterdam Croacia y España. El certamen continental que ya cuenta con las consagraciones de Portugal y Francia en el pasado, entregó un duelo marcado por la necesidad del título para dos selecciones que atraviesan ciclos opuestos.
Los de Zlatko Dalic, finalistas en la Copa del Mundo que organizó Rusia en 2018 y semifinalistas en Qatar 2022, soñaron con la estrella que se le escapó a una generación que hizo historia. Y La Roja, se esperanzó con la gloria en pleno recambio a cargo de Luis de la Fuente luego del paso frustrado de Luis Enrique.
Tras una agradable ceremonia de cierre, en la que las banderas de todos los países del Viejo Continente visitaron el verde césped, los protagonistas salieron a la cancha en busca de escribir la historia dorada. Y el combinado ibérico fue el que tuvo las ocasiones más claras para abrir el marcador. La primera fue a través de un centro cerrado de Fabián Ruiz que complicó a Dominik Livakovic, dado que el arquero mostró inseguridad a la hora de tomar la pelota y el palo evitó lo que hubiera sido un blooper inolvidable. La segunda, en cambio, se estableció mediante la presión de Gavi, quien recuperó en una salida defensiva y probó con un remate rasante que se fue ancho. En Rotterdam había mucha tensión y temor a la derrota.
La respuesta del elenco de la Europa del este llegó en los pies de Andrej Kramaric, tras una veloz corrida que el delantero no se animó a definir y le permitió a Aymeric Laporte recuperarse con una intervención heroica para desactivar el peligro. La ausencia de convicción del goleador y la velocidad del central conformaron los condimentos de una acción que pudo terminar en la red.
En el complemento los ingresos de Ansu Fati, Joselu y Mikel Merino le dieron más recursos a la Roja. Y el extremo del Barcelona tuvo la oportunidad de quebrar la resistencia balcánica luego de un buscapié de Nacho que desarticuló a la defensa. Sin embargo, el sacrificio de Ivan Perisic atentó contra los deseos ibéricos y su salvada se festejó como un gol. La final se extendió al tiempo suplementario, dado que después de 90 minutos los equipos no lograron sacarse diferencias.
La media hora siguiente tuvo un claro dominio español, pero la falta de efectividad de Dani Olmo atentó contra las intensiones ibéricas. Croacia, con mucho amor propio y orden defensivo, sostuvo los ataques de la Furia para alimentar su sueño a través de los penales.
Sin embargo, desde los doce pasos el héroe fue Unai Simón, quien le desvió los remates a Lovro Majer y Bruno Petkovic. Si bien Aymeric Laporte estrelló su disparo contra el travesaño, los goles de Nikola Vlasic, Joselu, Marcelo Brozovic, Rodri, Luka Modric, Mikel Merino, Marco Asensio, Ivan Perisic y Dani Carvajal conformaron la definición que le permitió a España volver a festejar un título después de 11 años. El jamón serrano tuvo un sabor mucho más exquisito que el crni rizot croata.